¡Hola de nuevo!
El plato que os traigo en esta entrada es un plato sencillo, simple, con todos los nutrientes que podemos necesitar, y perfecto cuando no nos encontramos especialmente bien. Cuando algo nos sienta mal, sepamos o no que es, no tenemos ganas de comer nada, nos duele la barriga, queremos vomitar, hay quien tiene estreñimiento y hay quien sufre descomposición... en ese caso lo ideal es volver a lo de toda la vida, ¡el arroz hervido! Por supuesto, puede resultar un poco monótono comer siempre lo mismo, pues el arroz constituye uno de los principales alimentos que podemos comer sin limitaciones, y a menudo abusamos de ello; así pues, si queremos disfrutar más a la hora de comer, lo mejor es cocinar distintas recetas aunque el principal ingrediente sea común. Esta receta es suave y nos permite comer cuando no nos entra nada al estómago, así no desfalleceremos y reforzaremos nuestro cuerpo en un momento de debilidad.
Igredientes:
- Arroz
- Albahaca
- Pechuga de pollo
- Carne magra
- Aceite
- Sal
Realización:
En primer lugar hervimos el arroz y lo colamos. Lo ponemos en un bol y le añadimos una pizca de sal y albahaca al gusto de cada uno. Por otro lado, ponemos la pechuga y los filetes de carne magra a la plancha, con un chorrito de aceite y otra pizca de sal. Una vez veamos que la carne está hecha como nos gusta, y el arroz listo, tenemos:
Para que sea más fácil ingerir los alimentos, troceamos la carne y la mezclamos con el arroz, juntamente con el jugo que suelta la carne cocinada; así, si no tenemos apetito para terminar toda la ración, al menos comeremos arroz y proteínas aprovechando al máximo cada mordisco que logremos ingerir:
Espero que os haya gustado esta receta, es sencilla, simple, nos puede sacar de un apuro y nos permite comer algo cuando no nos encontramos demasiado bien. ¡Salud y buen provecho!
